lunes, 29 de noviembre de 2010

BIUTIFUL: La belleza de Babel...

En lo particular el trabajo de González Iñárritu siempre me ha parecido muy bueno, sus películas son de mi total agrado. La escena final de Babel aún la tengo grabada en la memoria; el final de Biutiful me impactó, realmente me conmovió de forma inesperada. La película en su totalidad me ganó. No sé si sea o no su mejor película (a vista miope de mal cubero, me parece que no), pero por su tono sí es la más biutiful.



En general a mi me pareció una película CONTUNDENTE, en todo sentido, independientemente de su intenso impacto emocional que provocó en miguelito. Es una gran película porque evidentemente habla de la muerte, pero también de la Vida; habla del Amor filial en la relación padre-hijo(s), y me pareció que a veces eso se plasmaba de manera muy poética. Aunque la belleza a veces también va seguida de lo hórrido de la muerte, de la desesperación, de la áspera y calamitosa situación de unos personajes que viven o sobreviven en condiciones extremas, y no necesariamente las físicas o materiales, sino cuestiones más íntimas como las sentimentales y hasta espirituales. Mencionar lo de Javier Bardem sería redundar en su gran interpretación. Su personaje es un tipo que vive entre dos mundos, ya que por un lado es una especie de... cómo se llama... es alguien que puede hablar con los muertos, pues, sin que eso en pantalla se vea inverosímil o ridículo; sino que ese singular aspecto del protagonista es muy natural. En el mundo de los vivos se mueve entre el caos, el ruido, el dolor ajeno ya que es una especie de coyote que se mueve en el submundo de Barcelona traficando y explotando a inmigrantes indocumentados (africanos y asiáticos) a los que "consigue" trabajo de forma ilegal: ellos son Los abandonados, pudiera decirse, del siglo XXI y por ello el director hizo alusión a la película del Maestro Buñuel "comparándola" con la suya, quizá exageradamente. Por ello la película es sórdida, hay mucho ruido, literalmente, se mueve entre los barrios bajos, entre corrupción de todo tipo, desintegración familiar, alcoholismo, algo de homosexualidad, etc.

Esta película, y todas las del diector, es una Babel en sí misma, pero no sólo por los idiomas. La filmografía de Iñáritu, viéndolo bien, es una Babel no lingüistíca sino emocional-afectiva de muchos tipos. Me explico, sus historias, desde Amores perros pasando por 21 gramos, son de personajes marginales (sociales, laborales, afectivos...) que están perdidos en sus vidas (como los personajes de Lost, quienes fueron "salvados" por la isla en sí) y destinados a estar separados (por las clases sociales, por cuestiones geográficas, por enfermedades terminales, por conflictos internos sin resolver, por un atribulado pasado...). Son historias de personajes en continua búsqueda de redención que de alguna u otra manera están aislados del mundo, que aún vivendo en un una misma casa, son personajes en SOLEDAD o que terminan separándose (como metáfora de las sociedades actuales, quizá) pero que en determinadas situaciones - muy extremas - se unen aunque sea por un momento... o se alejan para siempre porque unos a otros no se entienden, como en una Torre de Babel con diferentes idiomas emocionales y espirituales. Bueno, eso ya daría para otra entrada/post.


Catálogo y Opiniones

(Des)informes / (Des)conozca más

Mi foto
LEÓNidas, Gto., La región más transparente del aire, St. Kitts & Nevis
Buen samaritano. Justo entre los justos. Sentado a la derecha del Padre...

YOMERO

YOMERO
¡Yupi!